Las preguntas más comunes sobre la copa menstrual
Hace casi exactamente un año publiqué una entrada sobre la copa menstrual. Ha sido una de las publicaciones más comentadas y más compartidas, así que puedo decir con confianza que no estoy sola cuando afirmo que ha sido “la mejor compra de la vida”.
La semana pasada, como parte de la serie que estoy haciendo con mis “antes y después”, publiqué una imagen en la que cuento por qué me parece que la copa es la mejor opción, y cuáles son las ventajas frente a las toallas y tampones. Todas las imágenes de la serie han tenido buena acogida, pero esta generó un tsunami de comentarios que jamás habría podido calcular. Perdí el hilo por completo, y si no fuera por varias lectoras que han estado súper comprometidas con la causa (¡muchísimas gracias chicas! ♥), ayudándome a responder dudas y comentarios, creo que para este momento habría perdido por completo la cabeza.
Para mí, lo que pasó con esa imagen deja tres cosas claras:
1) muchas mujeres adoran la copa (como yo),
2) muchas otras sienten mucha curiosidad al respecto, y
3) este es un tema del que hace falta hablar más, con menos tabú y con más respeto por nuestro cuerpo. Esto último lo digo porque —a pesar del tono respetuoso y amigable que ha usado la grandísima mayoría de la gente que comenta— no han faltado los comentarios agresivos de gente que se siente «ofendida» por el hecho de que se hable sobre el ciclo menstrual y sobre el cuerpo femenino.
Con todas las preguntas que surgieron, decidí que es importante dedicarle otra publicación; una que esté enfocada a resolver las dudas más comunes y que sirva como guía para todas las mujeres que sienten curiosidad por este tema.
Escríbenos si tienes dudas.